Jujuy: condenaron a 15 años de prisión a un sacerdote por abusar de una nena

La Justicia de Jujuy condenó a 15 años de prisión a “Cocó”, el sacerdote acusado de abusar sexualmente de una nena de 10 años en octubre de 2020.

El Tribunal en lo Criminal Nº 3, integrado por los jueces Ana Carolina Pérez Rojas, presidenta del debate; Pamela De Las Cruces y Mario Ramón Puig estableció la sentencia para Ricardo Quiroga durante la jornada de este martes tras encontrarlo responsable del delito de “abuso sexual con acceso carnal doblemente calificado por ser cometido por dos personas y ser miembro un culto religioso”. Además, fue inhabilitado de sus funciones por el período que dure la condena.

La pena deberá ser llevada a cabo en una cárcel común luego de que los magistrados rechazaron el pedido de prisión domiciliaria.
En el mismo juicio, además, fue condenada María Cielo Regazzoni a una pena de 10 años de prisión como partícipe necesaria. Fue detenida, ya que se encontraba en libertad, y la trasladaron de inmediato al Servicio Penitenciario.

Tras conocerse las sentencias, se informó que se tomará la muestra genética de ambos para incorporarlas al Registro Nacional de Datos Genéticos. Por otra parte, el segundo acusado de haber llevado a cabo el abuso, Leandro Torres Barrozo, fue absuelto por el beneficio de la duda.

Cómo fue el aberrante caso que condenó al padre “Cocó”

De acuerdo a los datos recopilados por la investigación de la fiscalía, el 24 de octubre de 2020, entre las 14 y las 16 h, Regazzoni llevó a una nena de 10 años hasta una vivienda ubicada en el centro de la ciudad de El Carmen. Allí la dejó junto al sacerdote, que en ese momento estaba a cargo de una parroquia de la localidad, quien golpeó a la menor y abusó de ella en una de las habitaciones del lugar.

Tras ello, se retiró del cuarto y en ese momento, de acuerdo al relato de la víctima, ingresó Torres Barrozo, quien también habría abusado de la pequeña. Sin embargo, esto último no logró ser acreditado, según la resolución del tribunal. Todo sucedió delante de la mujer, quien no intervino en ningún momento.

Luego del ataque, la acusada llevó a la nena a su casa, donde la bañó y le dijo que iba a quemar su ropa interior porque tenía sangre. Poco después la llevó con su mamá.