Tragedia aérea en India: un pasajero sobrevivió y salió caminando entre los más de 200 muertos
Milagro en la tragedia de Air India: un pasajero sobrevivió al accidente en Ahmedabad y caminó por sus propios medios fuera del avión. La historia que desafía las estadísticas.
En medio del horror que dejó el accidente del vuelo de Air India en Ahmedabad, donde un Boeing con destino a Londres se estrelló poco después del despegue, una historia imposible rompió con la resignación general: un pasajero logró sobrevivir, salir caminando entre los restos del avión y relatar su experiencia.
El protagonista es Vishwash Kumar Ramesh, un ciudadano británico-indio de unos 40 años que, contra todo pronóstico, salvó su vida. Según informaron medios locales como NDTV y Hindustan Times, Ramesh logró salir de la aeronave por sus propios medios y fue rápidamente asistido por los servicios de emergencia.
"Escuché un fuerte ruido apenas 30 segundos después del despegue. Todo fue muy rápido. Me golpeé el pecho, los ojos, los pies. Cuando recuperé la conciencia, había cuerpos por todos lados. Me levanté y corrí", contó aún conmocionado. Aseguró que fue un transeúnte quien lo ayudó a subirse a una ambulancia, mientras él, aturdido y sangrando, caminaba con su celular en la mano.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran a un hombre desorientado, con una camiseta blanca manchada de sangre, saliendo de la zona del desastre, donde aún humeaban partes del fuselaje. Una ambulancia lo esperaba mientras la multitud observaba en silencio.
Las autoridades indias habían confirmado oficialmente que no había sobrevivientes entre los aproximadamente 200 pasajeros, lo que hace aún más increíble el caso de Ramesh. “Un pasajero sobrevivió al accidente”, ratificó el comisario de policía de Ahmedabad ante el asombro general.
Ramesh, que reside desde hace 20 años en Londres, también relató que su hermano Ajay viajaba con él, aunque en una fila diferente del avión. Aún no hay confirmación oficial sobre su estado.
La tragedia provocó una profunda conmoción en India y en el Reino Unido, donde residía buena parte de los pasajeros. Mientras continúan las tareas de identificación de las víctimas, el testimonio del único sobreviviente se transforma en un símbolo de lo improbable y genera nuevas preguntas sobre el accidente.
