Sencilla y humilde: Así será la tumba del Papa Francisco en Roma
El papa dejó instrucciones de cómo tenía que ser su entierro en su testamento

El Papa Francisco, fallecido el pasado lunes a los 88 años, será sepultado en la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma, en una tumba sobria que refleja el espíritu austero y la profunda devoción mariana que caracterizaron su pontificado.
La Santa Sede dio a conocer los detalles del lugar donde descansarán los restos del pontífice: una sepultura ubicada entre la Capilla Paulina y la Capilla Sforza, marcada por una sencilla losa de mármol con la inscripción “FRANCISCUS” y una reproducción en plata de su cruz pectoral, símbolo distintivo de su ministerio.
Fiel a su estilo humilde, Francisco dejó instrucciones precisas en su testamento para que todo el proceso funerario se desarrollara sin ostentación. En línea con esa voluntad, el financiamiento de los arreglos fue cubierto mediante una donación privada que había sido previamente asignada.

“He proporcionado instrucciones pertinentes a Rolandas Makrickas, comisario extraordinario del Capítulo Liberiano, para transferir la suma correspondiente a la Basílica Papal de Santa María la Mayor”, escribió el propio papa en el documento testamentario. La identidad del benefactor permanecerá en el anonimato, cumpliendo con el deseo del sumo pontífice.
La elección de Santa María la Mayor, una de las basílicas más emblemáticas de Roma, no es casual. Francisco visitó este templo antes y después de cada viaje apostólico, y en reiteradas ocasiones expresó su cercanía a la figura de la Virgen María.
Con este último gesto, el Papa argentino cierra un ciclo terrenal en coherencia con su mensaje: una vida dedicada al servicio, la humildad y la fe. La tumba será accesible al público una vez finalizadas las ceremonias privadas y los actos litúrgicos de despedida.