"Si un pedacito de este libro es del agrado del lector, para mí, estará justificada su existencia"

El martes por la noche, el doctor Pablo Racedo, presentó en Tacuara su primera obra publicada por Alción Editora y así también se presentó en su otra faceta: el de escritor. Cualidad conocida por sus allegados, pero que a partir de su novela "Corazones perros", pasa a develarse para un público extenso.

Racedo estuvo acompañado en la exhibición de su novela, por el docente y escritor Fabián Soberón, quien fue además el encargado de presentar el libro, como también lo hizo en la propia obra en donde indicó "La novela de Pablo Racedo muestra que los apátridas también tienen sus dioses y que la podredumbre ácida de la ficción es una metáfora del mundo desleal e injusto que nos toca vivir".

La obra cuenta la historia del profesor René Orsini quien al cometer una serie de crímenes, esos actos "dejan al descubierto menos la maldad que el cinismo de la sociedad en la que vive", sostiene Soberón. Un personaje con una historia personal que se entrelaza con una sociedad, con una ciudad que puede ser reconocida en todas sus contradicciones por el lector, que vive, que observa y siente las mismas injusticias del mundo actual.

Durante la presentación Pablo confesó que no siempre escribió ficción, pero que de alguna manera siempre tuvo ese género en la cabeza, porque desde niño y hasta hoy la imaginación pudo dominarlo y lo llevó a considerar, aun no deseando, preguntas o situaciones posibles de los momentos más insignificantes de la vida cotidiana "estando en la fila de un banco o en el supermercado, no estoy ahí en realidad, estoy pensando sobre las personas que me rodean, cómo se mueven, cómo llegan de trabajar, si lo hace con alegría o con pesar [...]".

"Siento una grandísima pasión por escribir y por leer, como otras personas no pueden dejar de trepar una montaña o tienen amor por las ciencias, las matemáticas, la historia, la política, yo siento una gran pasión por escribir [...] Hacer lo que uno lo apasiona, lo hace sentir que está en el lugar y el momento correcto. Se tiene un equilibrio espiritual grandísimo que me resulta muy difícil describirlo, por eso escribir 'Corazones perros' a mi me ha proporcionado mucho placer".

En sus agradecimientos el escritor destacó, con respecto a la posibilidad de haber podido concretar la publicación de la obra, la aceptación de la editorial, puesto que "en este tiempo de crisis económica que vive el país y que las editoriales no son ajenas, que un sello editorial, que tiene una proyección nacional, se haya fijado en alguien del interior del país y del interior del interior, es una gran satisfacción que haya confiado en mi obra".

Por último Pablo se refirió a qué es lo que espera de la novela, y en un gesto de humildad, parafraseando al escritor ruso Fiódor Dostoievski indicó "tengo un objetivo muy chiquito, que al menos un capítulo, un fragmento...Si un pedacito de este libro es del agrado del lector, para mí, estará justificada su existencia".